Es tú culpa, no de Elon
En ésta entrega opino sobre un tema que no es nuevo, pero se mantiene vigente. Y como se deduce del título, se refiere a Elon Musk y “X”, anteriormente conocida como Twitter, donde continúan las quejas por el ambiente «tóxico», así que te voy a contar -en mi caso- como solucioné ese problema.
Si eres mas de escuchar que de leer, te dejo a continuación enlace al episodio Nº 196
Confieso que hace más de un año, cuando el multimillonario en cuestión se hizo con el control de la mencionada red social, pensé que el descontento duraría algunos meses, sobre todo por cuestiones ideológicas. Pero es que las quejas continúan, y de un tiempo a ésta parte se centran casi exclusivamente en la experiencia y la toxicidad de la red del ex pajarito. Y ojo, no digo que no existan cosas malas, pero dentro de esos que se quejan, la inmensa mayoría son conscientes de que lo provocan ellos mismos, y todo podría ser diferente.
Los que realmente me preocupan, son ese grupo de usuarios que sin duda será una minoría, y que aun no tienen claro de que dejar de pasarlo mal, por decirlo de alguna forma, es bastante sencillo, porque la culpa de lo que ocurre o encontramos en Twitter no es de Elon, es de los usuarios.
Y como lo hice hace meses, quiero volver a recalcar, que no tengo ninguna simpatía por el Sr. Musk. Es mas... no me interesa en absoluto, ni él ni sus negocios pasados, presente, o futuros. Por tanto no lo estoy defendiendo, y tampoco tengo ninguna razón para atacarlo o hablar mal de el, o de la red social de su propiedad. Mi único interés al grabar éste audio, es transmitir una experiencia propia en la que como usuario de Twitter no tengo ninguno de los problemas que dicen tener muchísimas personas que se quejan a diario, y no solo en esa red, sino también en otras.
Pareo vamos al grano. Quiero creer que a ésta altura ya nadie desconoce que exceptuando algunos casos puntuales, como por ejemplo Mastodon, el resto de redes sociales tienen un única razón de ser y existir; ganar dinero de la forma que sea. Y para ese fin se dedican a cosas como: recolectar y vender datos de los usuarios, cobrarles una suscripción por eliminar la publicidad, o directamente inundar su time line de anuncios, para facturar y facturar, teniendo a las personas pendientes de la pantalla el mayor tiempo que les sea posible.
La forma de conseguir esa atención casi o directamente adictiva, es el bendito algoritmo que registra todo lo que haces. Él es el encargado de hacerte falsamente feliz, o convertirte en un ser furioso, mostrándote que el mundo no va como tu quieres. Son dos caminos hacia el mismo objetivo, retenerte conectado, porque el hecho de que lo pases bien o mal da igual, lo importante es que permanezcas el mayor tiempo en la red, porque esa es la forma en que la empresa ganará dinero contigo.
Por tanto, si todos sabemos que existe un algoritmo, ¿porqué la gente se queja de lo que se queja? La verdad es que no tiene sentido, cuando el problema se puede solucionar, consumiendo lo que nos haga felices, en vez de aquello que detestamos.
Y reitero la idea, habrá quien hable mal de Twitter y Elon consciente de que casi le resulta un deporte quejarse, discutir y demás. Pero para quienes de verdad quieran poner solución al asunto, y tener una mejor experiencia, es solo cuestión de filtrar y evitar lo indeseado.
Y si hay algo en lo que todos coincidimos, es que en X hay un volumen de usuarios y contenidos, que no se encuentran en otros sitios. Así que la clave está en tomar lo bueno, y dejar pasar lo que no nos interesa. Porque si ves un vídeo violento, ya sea porque te ha llamado la atención, o directamente para comentar que horrible lo que muestra, etc., etc., no tengas dudas de que la próximas vez que entres en tu cuenta, habrá mas de lo mismo, y así con todo.
Si miras contenido sexual aunque sea poco, te llegará cada vez mas y mas de lo mismo, hasta puntos insospechados, contenidos de esos de lo que habría que salir directo a la comisaría mas próxima para denunciarlos. Y al mismo tiempo probablemente te sigan cuentas de bots intentando hacerte caer en estafas y demás, bajo la foto de perfil de un cuerpo bonito.
La clave está en no hacer lo que no quieres que el algoritmo asuma como aquello que debe darte para que te entretengas.
Twitter es como un gran centro comercial, hay de todo, pero tu eliges que quieres ver y que evitas. Si por ejemplo no tienes niños y no te interesa en absoluto la ropa de bebés, ni los juguetes, y mil cosas relacionada con ellos, lo que no puedes hacer es subirte al ascensor y en vez de bajarte en la planta de electrónica que es lo que te interesa, hacerlo en la de niños y bebés. Allí no vas a encontrar nada que te interese, y te sentirás a disgusto, o incluso agobiado, porque parecerá que no existe otra cosa. En ese micro mundo, encontrarás muchísima gente caminando y mirando, niños corriendo, chillando, probando juguetes y mil cosas mas. Y obviamente tú estarás echando pestes, ¿pero de quien es la culpa de que parezca que en ese centro comercial solo existen los bebés y los niños? Solo tuya, porque deberías haber ido directamente a la zona de electrónica que es lo que a ti te hace feliz.
Pero vamos a lo práctico ¿Cómo conseguir estar a gusto en Twitter, o X para los mas modernos? Muy fácil, no mires lo que no te interesa, porque haciéndolo, comentando, discutiendo, quejándote o lo que se te ocurra hacer para acabar con eso no va a servir absolutamente de nada. Lo único efectivos es ir directo a lo que sí te interesa, y de esa forma el algoritmo no te jugará en contra.
Para eso, desde casi el momento mismo en que me abrí perfil en Twitter -hace más de 12 años-, decidí hacer listas, para además de no perder tiempo, tener agrupada las cosas que me interesan, y poder ir directo a ellas.
Tengo por ejemplo una lista podcasters integrada por aquellos que hacen los podcast que escucho o me interesan. También otra con automovilismo, una de fotografía, etc.
Por tanto, en vez de ir a la pestaña “para ti”, donde evidentemente aparecerá lo que le hayas enseñado al algoritmo, me voy a las secciones que he creado yo, donde el riesgo de encontrarme con algo que no me guste o no me interese, es mínimo.
Está claro que al ver el contenido de esas listas, como están hechas a partir de perfiles y ellos pueden publicar cosas que no sean exactamente del tema que uno espera, te puedes encontrar con algo no deseado, pero eso también se puede ir mejorando, ya sea con bloqueo de palabras, etc.
Uno de los problemas mas comunes al ver por ejemplo las últimas novedades en mi pestaña “podcasters”, es que dentro de las publicaciones, puede haber algo de política, un tema que me tiene muy cansado y desde hace mucho tiempo filtro totalmente. Entonces, si alguno de los podcasters se pone a publicar mucho sobre ese asunto, en vez de un contenido orientado hacia lo que dio origen a la lista, lo que hago es quitarlo temporal o definitivamente de esa lista, pero eso no significa que lo deje de seguir. Y doy el ejemplo de contenido político, pero también he apartado temporalmente a personas que compartían videos violentos y otras cosas que no me interesan, porque si están dentro de tu scroll, luego aparecen como setas.
Haciendo este tipo de filtrado, puedo ir a mi pestaña podcasters, y estar mas a gusto, sin perderme nada, porque accediendo a “seguidos”, tengo la posibilidad de leer todas las publicaciones de la gente que temporalmente quité de la lista. Y en el caso de que esa persona deje de compartir cosas que no me interesan, siempre puedo reintegrarlo y ve allí lo que publica junto al resto que se centran mas en cuestiones de podcasting, o temas relacionados.
Como decía antes, también se pueden silenciar palabras, o buscar hash tags, pero para no estirar la cosa, tengo que decir que las listas a mi me funcionan perfecto.
Además el tiempo que se ahorra es muchísimo, respecto a mirar el time line general, donde te aparece todo tipo de cosas, incluida mucha publicidad, que por cierto en las listas casi no la veo, o al menos no me molesta.
La pestaña “para tí” es el reinado del algoritmo, donde siempre te va a colar tentaciones de todo tipo. Y además de lo que te interesa, habrá cosas virales, mil tonterías, y curiosidades o cuestiones impactantes o atractivas, que terminarás viendo o leyendo, con lo que dejarás huella. Y si te gusta, perfecto, pero si no te interese ese contenido, como cuando no quieres sopa, la próxima serán dos platos.
Por todo lo anterior, creo que afirmar rotundamente que Twitter es un asco, no tiene sentido, porque a pesar de que es innegable que tiene muchas cosas desagradables, al mismo tiempo es posible encontrar aquello que nos interese, guste, o haga feliz. Por tanto, si te resulta desagradable tu experiencia actual como usuario de esa red social, te invito a que te pongas manos a la obra filtrando lo que consumes, y verás que no todo es tan malo como parece.
Y hasta aquí la entrega de hoy de Bitácora Mental. Muchas gracias por tu tiempo al leer o escuchar éste episodio, y te espero en el próximo… Chauuu...