Pobres y sin derechos
Puede que esté equivocado, pero cada vez tengo mas la sensación de que en esta Europa, y mas precisamente España, ya no nos va quedando ni el derecho a ser pobres. Es que, por mas que los políticos se llenan la boca diciendo que no quieren dejar a nadie atrás, lo que le toca vivir a diario al ciudadano de a pie, no tiene nada que ver con todo eso que dicen para conseguir votos, perpetuarse en el poder, vivir del cuento, y además, ser aplaudidos.
Imagen: Matthias Zomer on Pexels.com
Si eres mas de escuchar que de leer, aquí tienes el audio del episodio Nº 208
Parece que has optado por leer, así que te doy la bienvenida a una nueva entrega de Bitácora Mental, y vamos con un par de ejemplos prácticos que ilustran lo que quiero decir, que mas que una sensación son ya realidades, al menos en el primero de los casos.
Resulta que si uno tiene un coche de ciertos años, aunque pase las ITV perfectamente, su propietario pague religiosamente el seguro obligatorio, el impuesto de circulación, y todo lo que tenga que ver con el uso y mantenimiento del vehículo de su propiedad, tiene vetada la entrada a las zonas llamadas de bajas emisiones. Es decir ciertas partes de todas las localidades de mas de 50.000 habitantes, pero también de aquellos municipios de más de 20.000 donde haya altos índices de contaminación.
Y antes que nada quiero dejar claro que estoy totalmente de acuerdo en el hecho de que es necesario bajar emisiones, y que tenemos que hacer lo posible no solo para mejor la calidad del aire, si no de todo aquello que signifique un beneficio respecto de la salud física y mental de todos los ciudadanos. Hecha esta aclaración, creo que como en todo, siempre hay formas de llevar a cabo los objetivos, y el hecho de prohibir la entrada a la gente que no dispone de un vehículo ecológico no contaminante, o lo suficientemente nuevo como para contar con el visto bueno para desplazarse con libertad por los sitios vetados al resto, me parece un ataque directo a los derechos de libre circulación, de quienes ahora mismo y por las circunstancia que sea, no tienen posibilidades económicas de permitirse un coche eléctrico, híbrido, o del tipo autorizado para ingresar en esas zonas.
No está de mas tener en cuenta que en éste 2024, la antigüedad del parque automotor español sigue subiendo. La edad de los turismos está ya rozando los 15 años, y no para de envejecer desde el año 2008. Es decir que no es tema coyuntural, ni achacable a la pandemia. Ahora mismo más de 9 millones de coches que representan prácticamente el 30% de los vehículos que circulan, no tienen distintivo ambiental de la DGT, justamente por su antigüedad, y forman parte del club de los “apestados”.
Es decir que si no puedes permitirte cambiar el coche, no tienes derecho a circular por determinados sitios, y no importa si el vehículo está en condiciones reglamentarias, y pagas los impuestos que sean necesarios. ¿Te van a reducir impuestos por no permitirte acceder a las zonas de bajas emisiones? NO.
Creo que hasta el mas tonto sabe que los coches tienen un desgaste importante con el uso, pero también por el simple paso del tiempo, con lo que tener uno de cierta edad, implica normalmente menos prestaciones, y un gasto importante en mantenimiento y reparaciones, a efectos de tenerlo en regla. Y nadie tira el dinero en un vehículo, si tiene la posibilidad de adquirir uno mas moderno y disfrutarlo sin problemas ni gastos extra, de esos que además de dejarte en la calle en el momento mas inesperado, te hacen un agujero en la cuenta del banco. Porque cualquier entrada a taller no es ningún chiste, y se pueden conseguir recambios accesibles, pero la mano de obra te cuesta lo mismo en un coche de 1.000 euros, que en uno de 50.000 euros.
Y lo que uno observa con estupor, es que para quienes pueden comprarse un coche de 50.000 euros, hay ayudas de todo tipo y de varios miles de euros. Mientras que para el individuo que realmente necesita un vehículo para llegar a su trabajo cada día, porque no tiene otra forma de hacerlo, a ese se le ignora.
Desde la tribuna política me lo podrán vender como quieran, pero eso es discriminación de contribuyentes, ayudar al que tiene mas y no ayudar al que tiene menos. Y luego, la cereza del pastel es al que tiene mas permitirle la libre circulación, y al pobre desgraciado que no puede comprarse otra cosa, prohibirle el acceso a los centros poblados.
Sin duda a las automotrices este destrato a los pobres les ha venido de perlas, porque han dejado de vender los modelos de la gama de acceso, los coches mas accesibles que hasta hace 4 días podías comprar por 10.000 euros, y ahora están concentrados en vender vehículos con nuevas tecnologías, mucho mas caros, con los que tienen mas margen, y además sus compradores reciben subvenciones alegremente, con lo que inflan aun mas los precios, y todos contentos.
Quizá en algún otro país este tipo de medidas sean un éxito, o al menos tengan sentido, pero en España la cruda realidad es que desde el año 2008 el poder adquisitivo de la mayoría del los currantes se ha ido a pique, y cuando el Dacia Sandero es el coche mas vendido durante varios años seguidos, da la idea de que el ciudadano de a pie no está para mariscadas, como otros.
La realidad es que en nuestro país el eléctrico está teniendo una penetración baja y lenta, con lo que muchos tiran por lo híbridos, pero los precios actuales complican la renovación del parque automotor, y como decía antes, estamos en los 15 años de edad en los turismos.
No tengo ninguna duda de que esos más de 9 millones de coches sin etiqueta que circulan a diario por las calles, contaminan bastante mas que los modelos de última tecnología, pero ¿de quién es la culpa de que continúen usándose? ¿De sus propietarios que tienen que hacer ingeniería económica para tenerlos en condiciones y poder seguir usándolos, o de los gobiernos que no han sabido hacer las cosas para bajar las emisiones rápidamente, usando el dinero público de forma responsable?
Lo mas lógico y sensato hubiera sido dar las ayudas, todos esos millones y millones de euros dedicados a quienes pueden comprar el coche que quieren y muchas veces no necesitan, y dedicarlos al sector de la población que verdaderamente conducía y conduce el tipo de vehículos que queríamos erradicar de las calles.
Y no era necesario hacer ningún milagro, porque estaba muy claro que la transición tecnológica en nuestro país iba a ser lenta, y no era posible renovar el parque automotor español en 4 días, y que todo hijo de vecino se pasara al coche eléctrico, híbrido y demás tecnologías modernas.
Si de verdad queríamos un cambio mas o menos rápido, la primer etapa era ayudar a eliminar los coches mas contaminantes, los que no tenían etiqueta, y los que hoy a pesar de ello se venden en muchos casos a precio de oro porque hay mucha gente que no puede comprar otra cosa. Infinidad de personas que tienen lo que tienen y no se puede permitir desembolsar miles de euros por un motor un cuatro ruedas, y aunque desde las altas esferas no se lo crean, hay millones de trabajadores que se quedarían sin empleo si no pudieran disponer de ese vehículo sin etiqueta que hoy tienen, o necesitan adquirir en un mercado totalmente alterado, y además a propósito.
Y como digo, no eran ni son necesarios milagros, ni políticos iluminados. Solo decisiones con sentido común, que permitieran que toda esa gente que tiene los coches mas viejos, se la hubiera ayudado para comprarse al menos un vehículo nuevo, de los que se vendían hasta que comenzó la pandemia. Con las ayudas que se han dilapidado y así continúan ahora mismo, hubiera sido posible.
Muchos millones de esos coches que cada vez son mas viejos y siguen en las calles, podrían haber sido achatarrados, y sus dueños tendrían hoy vehículos que aun siendo térmicos normales, al menos serían mucho menos contaminantes, produciendo un verdadero retroceso en los niveles de emisión del parque automotor español, y la renovación del mismo, en vez de contribuir a su incesante envejecimiento.
Solo había que implementar las ayudas de forma inteligente, y hacer que hubiera incentivos atractivos y reales, para que el proceso de cambio se llevara a cabo desde los cimientos, y no comenzando por el techo. Obviamente era muy apetitoso para las marcas y el gobierno, facturar y recaudar con los nuevos coches eléctricos que cuestan una pasta, y que evidentemente aportan un porcentaje de impuestos nada despreciables a las arcas del estado, que siempre esta sediento de dinero, ese del que incluso se ha llegado de decir el disparate de que “no es de nadie”, y demasiadas veces termina en las manos equivocadas.
Y es importante recordar que tenemos fabricas automotrices en España, y que lo que no tiene el menor sentido, es que por ejemplo en Catalunya, tengamos a Seat en camino de extinción, cuando perfectamente se le podía haber otorgado una licitación, o acuerdo bajo las cláusulas que correspondiera, para que fabricara un solo modelos sencillo y de acceso para aquellos que necesitaran un verdadero plan renove.
Ya lo mencioné en otro episodio hace tiempo, titulado “necesitamos coches baratos”. Perfectamente se podía haber hecho un acuerdo, y que esa marca u alguna otra, ofreciera un vehículo con un motor de los menos contaminantes actuales, y que sin extras y un equipamiento básico y mínimo, cumpliera las necesidades de un trabajador. Y me refiero a prescindir de cuestiones como llantas de aleación y artilugios varios que encarecen, sin los cuales se podría haber creado una oferta por un precio que no superaría los 10.000 euros, y que con ayudas y financiación se habría vendido muy bien. Obviamente a personas que cumplieran los requisitos necesarios para acceder a esas ayudas.
Pero eso no lo hemos visto. Lo que hemos visto es que los que podían gastar lo que quisieran en un coche, han sido regado con dinero público, mientras los mas necesitados no han conseguido beneficio alguno, sus coches han seguido envejeciendo, y continúan pagando impuestos como siempre, pero ahora ya no pueden entrar en las zonas en las que se ha determinado que los pobres, no son bienvenidos.
Y quizá tu que me estás escuchando tengas un punto de vista diferente, y digas que hay mil argumentos y cuestiones que podrían refutar mis palabras, pero mas allá de que compartamos tus argumentos, la cruda realidad es que quienes están encargados de hacer los cambios, los han hecho mal, y la prueba es irrefutable, cada vez hay mas coches contaminantes, cada vez son mas viejos y peligrosos en las calles. La cuestión es que si seguimos dándole a quien no necesita, y quitándole a quien no puede dar mas, nada va a cambiar (al menos para mejor).
Y si a ésta altura estás indignado o indignada, ya sea porque compartes mi punto de vista, o simplemente padeces esta realidad, pues tengo una mala noticia para ti. Lo próximo es el “palo en la rueda” en la vivienda, y te lo explico muy rápidamente porque ya me he extendido mucho en la parte anterior, y te dejaré el enlace al artículo donde leí la noticia hace unos días.
Resulta que se va a liar una gorda, porque se espera que en los próximos meses entre en vigor una nueva normativa europea, que pretende mejorar la eficiencia energética de los edificios. Y en base a ella, terminado el plazo otorgado para adecuarse, dentro de unos 5 años, es decir a partir de 2030 no se podrá vender o alquilar ninguna vivienda que no tenga como mínimo la calificación energética “E”. Mas adelante la exigencia será mayor, y se necesitará como mínimo la “D”.
Cabe aclarar que existen 7 niveles de eficiencia energética que van desde la letra “A”, hasta la “G”, y se pretende que todas las viviendas europeas tengan la calificación “E” para 2030 y “D” para 2050, prohibiéndose como decía cualquier operación de venta o alquiler de un inmueble, que no consiga esa calificación mínima.
Y para dar una idea del desastre que puede ser esto, basta mencionar que hoy mismo el 80% de las viviendas existentes en España no tienen la calificación mínima que se exigirá en apenas 5 años y algunos meses, porque estoy grabando en marzo del 2024.
¿Qué significa esto? Mas de lo mismo, que si no estás seguro de continuar viviendo en tu casa actual, mas vale que hagas las reformas necesarias y te gastes un buena pasta en obras, papeleo, inspecciones y demás, para tener tu certificado “E” como mínimo, o pronto no tendrás derecho a disponer de tu propiedad, mas allá de vivir en ella.
Y reitero mi posición como en el caso de las emisiones de los coches, estoy totalmente de acuerdo en todas las normativas que mejoran nuestras vidas. Pero una vez mas no estoy de acuerdo en la forma que se implementan las cosas. Y tiempo al tiempo, porque lo que va a ocurrir es que pronto habrá gente que necesite desprenderse de su vivienda rápidamente por el motivo que sea: pérdida de empleo, necesidad de traslado, problemas familiares, o imposibilidad de continuar asumiendo la hipoteca por el aumento del coste de vida, y resulta que incluso teniéndola pagada y estando al día en todos sus impuesto, no tendrá derecho a vender lo que es suyo, si antes no se gasta una pasta para reformarla.
Y ya sabemos lo que significa una reforma, problemas, dinero y ¿cómo vas a hacer una reforma y afrontar gastos, cuando lo que necesitas es vender para comer? Lo que esto ocasionará son abusos de todo tipo, con grandes capitales comprando viviendas de gente desesperada por hacerse con el efectivo, a los que harán firmar cualquier cosa, adelantándoles un dinero para hacer las obras, y luego concretar la venta.
Mientras tanto, quien pueda hacer obras y esperar, ocasionará que existan menos viviendas en el parque de venta. Eso traerá aumento de precios por la caída de oferta, y así un sinnúmero de trastornos varios en el normal funcionamiento del mercado.
Y ríete de aquello de esperar un año para que te entreguen un coche porque no había chips y esas cosas. Ahora tendrás que esperar 1 o 2 años para que alguien te haga la reforma, dejándote un riñón -o los dos- para cumplir la normativa, porque ya sabemos lo que ocurre cuando hay una demanda inusual en algo.
En resumen, que si tienes un buen pasar o eres rico, lo de siempre, la política europea y local te permite comprar tu libertad, circular por donde quieras y disponer de tus bienes sin problemas. Ahora… como seas un simple currante que llega a duras penas a fin de mes, o se salta alguna comida para echar gasolina e ir a trabajar, entonces para las elites eres un apestado. No te quieren circulando libremente porque perjudicas el aire que respiran, aunque ellos a escondidas envenenen el tuyo mil veces mas.
Y como eres pobre, y así queremos que continúes porque nos necesitas y podemos controlar, ahora tampoco te vamos a dejar vender tu casa, si antes no sacamos un poco de dinero haciéndote reformarla, eso sí, tu sacrificio es por el bien del medio ambiente, léase generar mas y mas ingresos por impuestos o lo que sea, para cubrir el presupuesto de un estado, donde el “apretarse el cinturón” solo aplica para los que no son de la casta.
Y hasta aquí el Bitácora Mental de hoy, gracias por tu tiempo, muchas gracias por leer o escuchar éste episodio, y te espero en el próximo… chau
El artículo al que se hace referencia es: https://www.eleconomista.es/vivienda-inmobiliario/noticias/12712896/03/24/la-prohibicion-de-alquilar-o-vender-tu-vivienda-llegara-en-2030-.html